Empleada se apropia de casa donde trabajaba luego del fallecimiento de la dueña

Una trabajadora doméstica ocultó el fallecimiento de anciana que la contrató para adueñarse de su vivienda y luego ordenó la cremación de su cuerpo.

En España, la policía investiga el caso de una trabajadora doméstica que habitaba la casa de una anciana fallecida, presuntamente por el Covid-19, donde trabajaba anteriormente. La empleada habría ordenado la incineración del cuerpo, sin avisar a sus dos hijas, para luego instalarse en la vivienda de la septuagenaria.

La anciana de 75 años, llamada Pilar, murió en su casa de Leganés (Madrid) a finales de marzo, y fue en su último mes de vida cuando contrato a la empleada llamada Rosa, de nacionalidad peruana y de 33 años.

Una de sus hijas sospecha que este caso sea algo más que una simple "apropiación de casa ajena", pues comenta que su madre no se encontraba mal de salud. Además, asegura que diez días antes de su muerte la empleada puso a su nombre los contratos de luz y agua de la vivienda y los seguros con un supuesto poder otorgado por la anciana.

"Me gustaría saber que pasó con mi madre esos días, yo también tuve coronavirus esa época y estuve 30 días ingresada. Cuando nos enteramos de su muerte ya estaba incinerada (...) Creo que mi madre no murió de forma natural y vamos a hacer todo lo posible para que se aclare lo que ha pasado. Tenemos indicios de que le pudo hacer algo", señaló Rosana, hija de Pilar.

Rosa, de nacionalidad peruana y de 33 años, es acusada por las dos hijas de la difunta víctima por no informar a la familia sobre el deceso, además de haber solicitado la cremación del cuerpo y ocupar la casa de Pilar. A mediados de febrero, la mujer peruana empezó a trabajar dos horas diarias en la limpieza de la casa de lunes a viernes. Según las investigaciones hasta ahora, Rosa indicó por teléfono a la funeraria de que Pilar no tenía familia. Presentó ante la empresa fúnebre una autorización para la inhumación del cadáver y también aportó una copia del DNI de Pilar y de su propio carné.

"Creemos que lo ha falsificado todo. Mi madre era muy desconfiada y no la creo capaz de firmar ese poder. Ni siquiera mi madre le dio las llaves de la casa cuando la contrató y siempre le abría la puerta. No sabemos como tenía las llaves de la casa y el motivo por el que se la encontró muerta", indicó la hija.

Rosa, además de negarse a realizar alguna declaración, dijo que en Perú las personas que cuidan a los ancianos se quedan con la propiedad cuando fallecen.

Mientras tanto, la empleada continúa residiendo en la casa. El yerno de Pilar dice haber intentado sin éxito negociar con la mujer durante las últimas semanas.

"Si tuviera dignidad se habría ido ya. Le he ofrecido hasta 6 mil euros y le he ofrecido trabajo y un piso de alquiler y me contestó que si le daba 15 mil euros que igual se iba", señala Juanjo, pareja de Rosana.

Los responsables de la empresa "Desokupa" aseguran que están planificando una acción para recuperar la vivienda usurpada el jueves por la mañana. Daniel Estévez, director de la empresa, señala que se acusará a Rosa por "homicidio, hurto, apropiación indebida, usurpación de domicilio y estafa".