Piuranos comen carne de dudosa procedencia en camal de Piura
La Municipalidad de Piura cerró las operaciones de su camal municipal después de recuperar la administración de manos de una empresa que lo tuvo en concesión por más de 10 años. Esto luego de ganar un proceso de arbitraje.
En tanto se reinician las operaciones, el cierre ha generado la aparición de lugares de matanza clandestina en la ciudad lo cual pondría en riesgo la salud pública de la población por el consumo de carne contaminada y de la cual se desconoce su origen.
Según la gerente de Servicios Comerciales de la comuna piurana, Guadalupe Arellano, ya se detectó la presencia de camales clandestinos en Piura y Castilla, los cuales no brindan ninguna garantía de salubridad sobre el proceso de beneficio del ganado.
“De los 22 camales que funcionan en Piura, ninguno está autorizado para realizar esta labor de beneficio. No tenemos control del origen de estas carnes. Los mismos ganaderos nos dicen que se han establecido varios camales clandestinos en diferentes zonas de Piura y Castilla”, explicó la funcionaria municipal.
Sobre el tema, el jefe del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) en Piura, Daniel Alama, puntualizó que la salud pública de los piuranos se pone en riesgo porque no hay certeza de la procedencia de la carne que consumen los piuranos.
“Si es que el ganado ya no se sacrifica en el camal de Piura, entonces el riesgo es que sea faenado en lugares clandestinos. Y cuando el ganado es faenado así, no están dadas las condiciones para hacer un trabajo inocuo, es decir, hay mucho peligro de contaminación y que se trasmitan enfermedades”, expresó el representante de Senasa en Piura.
En algunos casos el ganado presenta casos de tuberculosis que puede ser detectado por un médico veterinario en un local autorizado.
Sin embargo, los ganaderos y comerciantes de carne comentaron que después del cierre decidieron sacrificar el ganado en los camales municipales de Catacaos y La Unión. Si bien no tienen autorización de Senasa, dijeron, sí cuenta con un médico veterinario para certificar el buen estado de la carne.
Según sostuvo el dirigente de los comerciantes de carne, Heraldo Torres, tienen sobrecostos en su actividad por el cambio de lugar de sacrificio de su ganado vacuno por lo que exigen al municipio de Piura, en la rápida apertura del camal municipal.
“Desde hace un año ya se sabía del fallo del arbitraje que devolvía el camal y no han tenido un plan de contingencia. ¿Cómo quedamos los comerciantes para el sacrificio de ganado?”, cuestionó el dirigente.
Relató que en promedio los piuranos comen entre 80 a 100 reses diarias, sin embargo, el camal de Catacaos solo tiene capacidad para 40 animales para atender su demanda diaria. Debido a ello, el local trabaja en horario extendido.
De otro lado, la gerente de Servicios Comerciales de la comuna reiteró que la infraestructura se pondrá operativa el fin de mes. Por ahora se busca la forma legal para dar en concesión el local o tercerizar la administración.
Agregue un comentario
Usted debe iniciar sesión para publicar un comentario.